Todos estos equipos necesitan trabajar con otros elementos y aplican, además, diferentes lógicas de operación. En este artículo, abordamos estos aspectos para que pueda elegir el controlador de temperatura adecuado a sus necesidades.
Son innumerables las actividades y procesos en que necesitamos controlar la temperatura, por lo que existe en el mercado una amplia gama de controladores con distintas capacidades y características.
¿Qué es el controlador de temperatura?
Se puede definir como un instrumento diseñado para que un proceso o recinto opere bien. Es decir, dentro de un rango de temperatura deseado, y para lo que ejerce control.
Los detalles del funcionamiento
Mediante este dispositivo, ejercemos control cuando queremos alcanzar y mantener un estado deseable. Es definido por el usuario conforme a sus requerimientos. Por lo tanto, todo controlador debe permitirnos definir ese estado. Y en este caso, debe permitirnos ingresar la temperatura deseada para el recinto o proceso donde queremos tener control.
Cuando ya se conoce y antes de ejecutar cualquier acción, requiere primeramente “medir” la temperatura del recinto o del proceso y compararla luego con la deseada. Para ello, debemos disponer de sensores de temperatura, tales como una termocupla, un sensor PT100 u otro.
Cuando el controlador cuenta con la temperatura deseada y la medida, puede realizar las comparaciones. Esto de acuerdo a ciertas lógicas de operación expresadas en algoritmos, y le permite llevar la temperatura medida al setpoint deseado.
Los tipos de controladores
Básicamente, hay tres tipos de control de temperatura básicos: PID, On/Off y Proporcional.
• El controlador de temperatura On/Off (encendido/apagado): Este tipo es el más básico para controlar la temperatura. En términos simples, el controlador enciende o apaga un dispositivo que actúe sobre esta variable.
• Controlador de temperatura Proporcional: Este nos ofrece un tipo de respuesta que nos otorga una mayor estabilidad. Se aplica principalmente a procesos en donde se requiere alcanzar una determinada temperatura sin sobrepasarla. Regula la temperatura de los calentadores al mantenerlos encendidos solo por periodos.
• Controlador de temperatura PID: Básicamente se trata de un control proporcional (P) combinado con dos ajustes adicionales que permiten compensar automáticamente las variaciones de temperatura: integral (I) y derivativo (D). En este tipo de control, el énfasis está puesto en la capacidad que posee el controlador para combinar la rapidez con que se corrigen los errores (brecha entre la temperatura deseada y la medida) con la estabilidad del sistema para que, en el intento de corregir rápidamente los errores, no se sobrepasen las temperaturas deseadas, proporcionándonos un control de temperatura más preciso y estable a la vez.
Hay empresas que necesitan este tipo de dispositivos para operar de la mejor manera y sin riesgos. Nosotros podemos surtir de acuerdo a tus necesidades.